Es aquella compuesta por un edificio con varios locales y/o viviendas destinadas al alquiler y que pertenecen a uno o más propietarios. A diferencia de la propiedad horizontal, no constituye una comunidad de propietarios, pero sus dueños tienen la obligación de conservar el inmueble en buen estado y cumplir con sus deberes fiscales y administrativos.
Como administradora de fincas colegiada, me encargo de gestionar tu propiedad y velar cada día por la conservación y rentabilidad de tu patrimonio inmobiliario. Tanto si cuentas con un piso, un local o un edificio completo en régimen de alquiler, desde mi despacho profesional me ocupo de todo para que disfrutes de una gestión eficiente y sin preocupaciones. Estos son los servicios que pongo a tu disposición:
Preparo informes claros y detallados con la liquidación de ingresos y gastos, adaptados a la frecuencia que prefieras.
Además, incluyo la contratación de profesionales, obtención de licencias y solicitud de ayudas disponibles.
Coordino la contratación de seguros adecuados para el inmueble y gestiono cualquier siniestro.
Realizo un control exhaustivo de los pagos y, si es necesario, llevando a cabo procedimientos judiciales.
Preparo y presento las declaraciones fiscales de ingresos por alquiler, garantizando el cumplimiento tributario.
Actualizo las rentas según lo previsto en los contratos, aplicando revisiones de IPC, repercusiones de obras o gastos.
Gestiono el pago de salarios, cotizaciones y obligaciones laborales del personal.
Organizo y realizo los pagos de todos los gastos asociados al inmueble, manteniendo las cuentas al día.
Superviso y gestiono el cobro mensual de las rentas, garantizando puntualidad en los pagos.
Me encargo de gestionar el depósito de la fianza ante el organismo correspondiente.
Elaboro contratos claros, y conforme a la normativa vigente, además de gestionar sus renovaciones.
Realizo una selección cuidadosa del inquilino, garantizando avales y garantías.
Con un servicio completo y transparente, me ocupo de cada detalle para que tu propiedad esté siempre bien gestionada y tú puedas dedicar tu tiempo a lo que realmente importa.
Me encargo de todo para que tú no tengas que preocuparte por nada.
Optimizamos costos y aseguramos cobros puntuales para mayor estabilidad.
Supervisión constante para evitar problemas y mantener su valor.
Comunicación clara y reportes detallados sobre la gestión.